Ya no dejare más flechas en el camino,
huellas describiendo un sendero desconocido,
tocar tu hombro es liberar el mural de los recuerdos
traspasar el umbral de tus palabras;
Que repito tras el horizonte sin fundamento
algo letal, entre un abrazo en mi memoria y la
compuerta en el firmamento de ilusiones
o quizás, la fuente inagotable de un silencio
que al cerrar los ojos , se hace mas intenso
un sendero que me lleva a visitar el mismo lugar,
deteniéndome a escuchar un sonido irreal,
el eco de tu sonrisa, cuan mágico caudal.
El abrigo que robo mi aliento impregnando un
sentimiento que susurro un te quiero eterno…
H.R
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